Los efectos de la decisión del MSCI se hicieron sentir durante la semana con el índice de acciones
argentino perdiendo un -2,77% en las últimas 5 ruedas y los bonos soberanos cayendo casi un -2%.
Ante presiones gubernamentales a operadores bursátiles los dólares financieros controlaron sus
disparadas para cerrar con brechas en torno al 73%.
En cuanto al ámbito internacional, los índices de Wall Street cierran la semana en máximos
adentrándose en lo que será un fin de semana extendido por el feriado por el día de la independencia
estadounidense. El S&P 500 y el Nasdaq marcan subas respectivas de +1,7% y +1,9%, mostrando
mejor desempeño relativo que el más cíclico Dow Jones, que cierra la semana con una suba de +1%.
El resto de las regiones mostró mayor debilidad, con cesiones de -1,1% para el índice Nikkei y de
-2,1% para el Shangai Composite, dentro de Asia, y también con caídas del -1,4% en el Bovespa y
-0,7% para el Mexbol.
El mercado mantiene la conducta que lo ha caracterizado en los dos últimos meses: cesión en las
tasas largas con aplanamiento de pendientes, reducción de spreads crediticios y subas en renta
variable con un gradual abandono de la rotación sectorial hacia sectores cíclicos y value, movimiento
que se dio de forma muy intensa entre noviembre del año pasado y abril.
